TOLDOS PARA TERRAZAS

Disfrutar de un espacio exterior en el propio hogar es todo un lujo que merece la pena exprimir al máximo. Si no utilizas tu porche o terraza porque hace demasiado sol o está desprotegido de las inclemencias del tiempo en invierno, quizá sea el momento de plantearte poner un toldo para terraza en tu hogar o local. 

Hacer la elección del toldo perfecto para tu terraza no es algo sencillo. Por eso en nuestra tienda online de toldos, encontrarás siempre un asesoramiento profesional y personalizado para saber qué toldo de terrazas comprar.

En Toldos y Persianas Andalucía encontrarás toldos para terrazas pequeñas, y también para aquellas de mayor tamaño. 

En cualquier caso, los toldos con brazos articulados son la opción más robusta y estética para proteger del sol tu terraza, de una forma segura y eficaz.

Los sistemas con cofre son los más resistentes y duraderos. Ya que cuando el toldo permanece cerrado, este mecanismo protege completamente la lona y su estructura. Con lo que se consigue una vida útil más larga.

Los toldos mecanizados son la opción más cómoda para empezar a disfrutar de este espacio sin esfuerzo alguno, o regular cómodamente la posición según las necesidades de cada momento. 

Este tipo de sistema cuenta con aperturas y cierres más suaves, que hacen que la lona del toldo quede siempre perfectamente tensada.

En el mercado encontrarás telas y lonas de toldos de todo tipo. La opción más económica es la tela de poliéster, pero también es la que menos dura y la que antes se estropea con el sol. 

Por otro lado, las acrílicas filtran el 80% de los rayos UV y resisten bien el viento y la lluvia. También son perfectas las telas microperforadas, que filtran el 94% de los rayos UV y ofrecen la mejor ventilación.

Tal y como ocurre con los toldos para balcones y toldos para ventanas, los toldos de terraza también están sujetos a legislación. Aunque esta tan solo afectará a viviendas que se encuentren en un edificio con comunidad de propietarios. 

Así que antes de comprar un toldo para terraza, te aconsejamos preguntar la normativa vigente en la comunidad de propietarios. Seguro que el Presidente o Administrador de Fincas te indicará qué tipo de toldo puedes instalar, o si en cambio no existe ningún modelo establecido. 

En algunos casos la comunidad acuerda el tipo de toldo que puede ponerse en la terraza, el color de este, sus medidas o ubicación. 

En el caso de que exista una ley sobre la colocación de toldos y la incumplas, las consecuencias pueden ir desde la orden de retirar los toldos ya instalados, hasta una multa por incumplir las ordenanzas comunitarias. 

La legislación que deberás tener en cuenta a la hora de poner los toldos en terrazas es la Ley de la Propiedad Horizontal (LPH), la cual regula también el cerramiento de terrazas, o la colocación de cualquier otro elemento que pueda afectar a la estética de la fachada del edificio. 

Si el propietario quiere instalar un toldo en su terraza sin respetar las pautas fijadas, podrá pedir permiso a la comunidad, y esta aceptará o rechazará dicha petición.

Además de la calidad del toldo que adquieras, la duración de este también dependerá de los cuidados que le dediques y el tipo de mantenimiento que lleves a cabo. 

• Limpieza profunda al menos una vez al año. Las inclemencias del tiempo, el polvo y los pájaros hacen que para mantener el toldo en perfectas condiciones se requiera una limpieza en profundidad al menos cada seis o tres meses. 
• Utiliza los productos adecuados para limpiar el toldo. Para proceder a esta limpieza puedes emplear un cepillo suave y agua jabonosa abundante, o agua a presión (según el tipo de lona). Limpia los brazos con paños suaves, como los paños de micro-fibra. Revisa de vez en cuando todo el mecanismo con una esponja para que dure más tiempo limpio. Evita siempre productos químicos o abrasivos que puedan dañar tu toldo y conseguir el efecto contrario al deseado. 
• Recoge el toldo seco. Muchas veces recogemos el toldo cuando ya ha empezado a llover o justo después de haberle caído agua. Lo ideal es que siempre que puedas lo enrolles cuando aún está seco. De esta forma se evita que aparezca moho, y por tanto, que dure en perfectas condiciones más tiempo. 
• Revisa el toldo con frecuencia. Lo ideal es revisar el toldo con relativa frecuencia para comprobar que ninguno de sus elementos estén dañados y puedan provocar que los brazos se desnivelen o la lona se deforme. 
• Presta atención a las especificaciones del fabricante. En el manual de instrucciones y cuidados de cada modelo encontrarás las recomendaciones en cuanto a limpieza de la lona, teniendo en cuenta la calidad y las propiedades del producto. 
• No fuerces. Si notas que cuesta manipular el toldo con normalidad, no intentes forzarlo. Mejor observar si hay algún obstáculo.

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